El Gobierno enfrenta un panorama fiscal desafiante, con menores ingresos y un déficit que obligó a aplicar un ajuste presupuestario de 1.990 millones de dólares. No obstante, esta medida ha sido considerada insuficiente para equilibrar las cuentas públicas, proyectándose que la próxima administración deberá implementar un recorte inicial de al menos 1.000 millones de dólares. En este contexto, el Ministerio de Hacienda ya inició la elaboración del Presupuesto 2026, el último de la actual gestión.
Entre los lineamientos enviados a los ministerios, se establece un límite de gasto del 98% respecto al presupuesto vigente, con excepciones sólo para 35 leyes actualmente en proceso de implementación. Además, se ordenó restringir los viáticos y las horas extraordinarias al 90% de lo proyectado para el próximo año. No habrá financiamiento para nuevos programas y toda reformulación deberá pasar por una evaluación previa.
El foco del ajuste está en garantizar la continuidad operativa del aparato público, priorizando las obligaciones legales y contractuales. Hacienda busca optimizar los recursos mediante reasignaciones internas dentro de cada cartera, consolidando programas y mejorando la calidad del gasto con criterios de eficiencia y eficacia.
La Dirección de Presupuestos recibirá las propuestas ministeriales hasta el 30 de mayo. Posteriormente, se dará inicio al análisis técnico y político del proyecto, el cual deberá ser presentado ante el Congreso Nacional en septiembre, conforme al calendario establecido.