Este domingo 18 de mayo se cumplen 20 años de una de las tragedias más dolorosas ocurridas en el Ejército de Chile en tiempos de paz: la muerte de 44 conscriptos y un suboficial tras una marcha de instrucción bajo condiciones climáticas extremas en las cercanías del volcán Antuco, en la Región del Biobío. Las temperaturas llegaron a descender hasta los -35°C.

Como parte de las actividades conmemorativas, el municipio de Antuco organizó este sábado una ceremonia en el gimnasio municipal, donde participaron familiares de las víctimas, sobrevivientes del hecho y autoridades civiles y militares, entre ellas el general director del Ejército, Javier Iturriaga.

La alcaldesa de la comuna, Sandra Bobadilla, expresó que la tragedia dejó una lección imborrable para el país. “Seguiremos acompañándoles siempre y Antuco nunca olvidará este acontecimiento”, afirmó, subrayando que ha sido la misma comunidad la que ha mantenido vivo el recuerdo de lo ocurrido.

Uno de los momentos más emotivos de la jornada fue el discurso de Angélica Morales, presidenta de la Agrupación de Familiares y Amigos de los Soldados Fallecidos en Antuco, quien destacó la ofrenda con los rostros de los 45 fallecidos. “¿Quién podría olvidar a su hijo? Ninguna de las mamás que está aquí ha olvidado por un solo día lo que significa esa pérdida”, señaló conmovida.

Morales también abordó el impacto emocional que ha perdurado por dos décadas. “Mucha gente quisiera que las tragedias pasen rápido y se olviden, pero no se puede olvidar lo que significa vivir como sobreviviente. Veinte años no es nada, dice el tango, pero para cada una de las mamás, veinte años fueron ayer”, expresó.

Para este domingo, en el marco del Día del Conscripto, el Ejército de Chile realizará una ceremonia oficial en el Destacamento de Montaña N°17 de Los Ángeles, en honor a los jóvenes soldados que perdieron la vida en la tragedia de Antuco, una herida que aún permanece abierta en la memoria del país.