El Gobierno aún mantiene cerradas las importaciones de pollo provenientes de Brasil, a pesar de que ese país fue declarado libre de gripe aviar por la Organización Mundial de Sanidad Animal (OMSA) el pasado 18 de junio.
La medida sanitaria, vigente desde mayo tras el brote detectado en el estado de Río Grande do Sul, desató críticas desde el sector gastronómico, que acusa impacto directo en los precios y abastecimiento de productos.
«A mí me gustaría primero decir que nosotros somos totalmente conscientes y estamos de acuerdo con la política chilena de protección de su inocuidad fitosanitaria», señaló el presidente de la Asociación Chilena de Gastronomía (Achiga), Máximo Picallo a Emol.
Sin embargo, advirtió que «la reapertura de ese mercado nos parece que ha sido más lenta de lo habitual. Y además considerar que esa lentitud la van a pagar los consumidores».
Según Picallo, la suspensión de los envíos brasileños ha afectado tanto la disponibilidad como el costo de una de las proteínas más consumidas por las familias chilenas.
«Aquí, básicamente el pollo, que es de las proteínas más baratas que tienen los chilenos (…) al haber menos oferta, evidentemente que eso va a significar que ese precio siga elevado producto de esta restricción de Brasil», dijo, y agregó: «No solo afecta el precio, sino que afecta también en el nivel de abastecimiento».
El dirigente gremial remarcó además que «entiendo que Chile es de los pocos países que sigue con el mercado brasileño cerrado. Acá todo el mundo ya abrió la importación de pollo desde Brasil, entonces tomarnos ese plazo va a significar un mayor costo para los consumidores por todo ese tiempo».
Desde el Ministerio de Agricultura, en tanto, el titular de la cartera, Esteban Valenzuela, señaló que aún no se han restablecido las importaciones debido a que «con Brasil no tenemos aún lo que se llama la zonificación, que sí tenemos con Europa, con Estados Unidos, con Canadá».
Esta zonificación permite delimitar geográficamente las restricciones en caso de brotes sanitarios, lo que agiliza las reaperturas.
Con todo, Valenzuela aseguró que están en proceso de diálogo con las autoridades brasileñas y que esperan una pronta solución. «El día 11 de julio es un día muy importante porque estamos recibiendo la respuesta respecto a que ellos se declararon libres ya de la gripe aviar, y eso nos va a permitir, durante fines de julio, o más tardar los primeros días de agosto, poder reabrir este comercio», indicó.
El titular de Agricultura también destacó el peso del producto brasileño en el consumo nacional.
«Sabemos además la importancia para nuestras fiestas patria y todo lo demás. Ellos (los brasileños) aportan en torno al 10% particularmente del pollo que los chilenos consumimos», acotó.
Así, mientras se concreta la reapertura, desde el sector gastronómico insisten en la urgencia.
«Donde yo sí creo que se produce un problema es en los consumidores individualmente, en la persona que compra el pollo en el supermercado o en tiendas de pollo, que a la vista de menor disponibilidad de producto, el precio sí se ve incrementado», concluyó Picallo.
Fuente: Emol.com