Comunidad indígena de San Pablo celebra llegada de la electricidad tras años de espera

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Cuando se habla de tecnología inalámbrica, inteligencia artificial y diversos adelantos de la ciencia actual, todo parece indicar que la electricidad es algo básico en toda sociedad humana.

Sin embargo, en el año 2024, la energía eléctrica en algunos sectores rurales sigue siendo un anhelo. Según datos del Ministerio de Energía, la cobertura eléctrica en Chile a nivel rural, es del 96,5%.

Y a esta cifra se pueden unir los miembros de la comunidad indígena Jotun Mapu del sector de Quilquilco, en la comuna de San Pablo: la empresa Saesa les realizó la instalación y respectivo empalme para su sede social construida hace dos años, lo que fue calificado como “una salvación” por parte de Ingrid Melillanca, presidenta de la agrupación.

El poder reunirse de noche, quizás compartir algunas comidas, celebrar fiestas, aprender a usar los computadores, es algo que destacó María de Los Ángeles Alvarado, vecina de Quilquilco.

La instancia, que favorece a diversas organizaciones de la sociedad civil, denominada “Conecta tu Sede”, es una iniciativa abierta de Saesa, cuyas condiciones de postulación se pueden revisar en su sitio web o redes sociales, y así, tal como la comunidad Jotun Mapu, otras organizaciones de sectores recónditos de nuestra región, puedan tener su conexión segura a la red eléctrica.