Un duro golpe judicial recibió la empresa Colbún, tras ser declarada responsable del grave deterioro ambiental en el Lago Chapo, en Puerto Montt.

El Tribunal Ambiental de Valdivia acreditó que la operación de la central hidroeléctrica Canutillar generó fluctuaciones extremas de hasta 20 metros en el nivel del agua, provocando erosión, pérdida de biodiversidad y exposición del lecho lacustre.

La sentencia ordena a la compañía restaurar las riberas con técnicas de bioingeniería, utilizar especies nativas y someter su operación al Sistema de Evaluación Ambiental, actualizando sus estándares frente al cambio climático, así lo explicó el abogado Luis Toledo, representante de la Sociedad de Inversiones Metahue y vecinos del sector.

El abogado Toledo agregó que la justicia determinó que Colbún actuó con culpa al no prevenir impactos previsibles, siendo un agente técnico especializado, y advirtió que la producción energética no puede seguir destruyendo ecosistemas frágiles.

La empresa deberá presentar un plan de reparación en un plazo de 120 días y socializarlo con la comunidad. El caso, sienta un precedente en defensa del patrimonio natural, en una zona colindante con el Parque Nacional Alerce Andino y la Reserva Llanquihue.