El presidente de la Comisión de Salud del Senado, Iván Flores (DC), calificó como “el peor caso de corrupción” desde la colusión de los medicamentos el uso fraudulento de licencias médicas por parte de más de 25 mil funcionarios públicos, detectado por la Contraloría General de la República. Según el organismo, entre 2023 y 2024, al menos 25.078 trabajadores fiscales viajaron al extranjero durante sus períodos de reposo, y 250 profesionales de la salud incluso atendieron partos en clínicas privadas mientras estaban formalmente con permiso médico.

En entrevista con radio Cooperativa, el senador fue enfático al señalar que “aquí hay 25.000 funcionarios que cometieron delito y se tienen que ir. No hay espacio para sumarios ni investigaciones administrativas, porque no va a haber quién las haga”. A juicio del parlamentario, el caso constituye un verdadero “portonazo a Chile”, que afecta directamente a la fe pública y a los ciudadanos más vulnerables.

Flores insistió en que los implicados deben ser sancionados sin más demora. “Hoy debería castigarse a aquellos funcionarios públicos que cometieron delitos. Esto no se resuelve con una investigación administrativa. Es imposible hacer 25 mil sumarios, no hay gente suficiente para hacerlos. Lo que hay que hacer es aplicar la norma y punto”, afirmó el senador.

Respecto a las medidas que se tomarán frente a este escándalo, el legislador advirtió que no puede haber margen para defensas corporativas. “Espero que no haya ningún dirigente gremial en ninguna región de Chile que defienda lo indefendible”, sentenció, remarcando que quienes cometieron delito “no pueden seguir en la administración pública”.