En 18 días, el crimen de Eduardo Cruz-Coke y sus dos hijos de 17 años tuvo un vuelco tras la realización de pericias y la formalización del principal sospechoso del triple homicidio: Jorge Ugalde, cuñado de Eduardo y tío de los adolescentes.

El resultado del proceso investigativo llegó a que los investigadores debieran abandonar la tesis inicial y así abrir una nueva hipótesis.

En primer momento, el caso fue indagado como un doble parricidio con posterior suicidio, sin embargo, ahora se trata de tres delitos de homicidio calificado.

18 de octubre – Hallazgo

El crimen ocurrió en un terreno donde se emplazan tres casas habitación, ubicado en la calle La Cañada. En ese lugar vivían tanto Eduardo Cruz-Coke como Ugalde.

Según los primeros antecedentes, Ugalde había llegado cerca de las 19 horas del 18 de octubre al terreno donde residía su pariente y posteriormente encontró al adulto con un profuso sangrado y un arma a un costado (después se dio cuenta de que era de fantasía). En una de las habitaciones ubicó a sus sobrinos sin lesiones evidentes.

El fiscal Francisco Lanas, de la Fiscalía Oriente, detalló en ese momento que «no tenemos una hipótesis por el momento, a la espera del trabajo del laboratorio, lo que sí podemos descartar preliminarmente es que se trataría de alguna especie de robo. Sería más una situación de índole familiar».

En primera instancia, el caso se indagó como un posible doble parricidio con suicidio, donde el padre habría dado muerte a sus hijos y luego se quitó la vida.

Indagatorias

Pero las diligencias del caso fueron despejando inconsistencias y abriendo una nueva línea investigativa. Por ejemplo, no se halló la supuesta arma homicida con la que Cruz-Coke habría matado a sus hijos y luego quitado la vida.

Sumado a eso, los investigadores establecieron que existían antecedentes de rencillas entre Ugalde y Cruz-Coke respecto a asuntos patrimoniales.

Cercanos a Cruz-Coke señalaron ante los investigadores que era inverosímil que el padre haya sido el autor del crimen.

3 de noviembre – Detención

La fiscal Carolina Remy-Mayllet explicó ayer que «preliminarmente, ya teniendo el informe de autopsia de la víctima adulta (…) se descarta claramente que hayan sido lesiones autoinferidas», por lo que la tesis de homicidio calificado «cobró más fuerza».

Funcionarios de la PDI, entonces, acudieron este lunes hasta la vivienda ubicada en La Cañada para detener a Ugalde. La policía lo ubicó sentado, meditando y no opuso resistencia a la aprehensión.

Tras la captura, las autoridades ofrecieron un punto de prensa. Lanas dijo que la coartada de Ugalde fue chequeada por los investigadores, por lo que «se fueron descartando cada uno de los puntos que él destacó en su declaración».

«A partir de las cámaras de seguridad, a partir de evidencia genética del sitio del suceso, trabajo de cámaras corporales, de Carabineros, se pudo descartar cada una de sus teorías», dijo el persecutor.

Lanas agregó que clave fueron las incongruencias en su relato. «Parte del trabajo de las cámaras de seguridad era establecer la ruta que siguió el imputado momentos antes y después de la comisión del hecho. Esto nos permite establecer que el imputado se deshace de un elemento, que estamos en materia de investigación, qué contenía dicho elemento, pero se contradice con lo señalado en su declaración, que él solamente salió a correr con su perro, solamente a dar una vuelta cerca de su domicilio para luego volver en horas que tampoco pudieron ser corroboradas mediante las cámaras de seguridad».

El prefecto inspector Jorge Abatte, Jefe Nacional de Delitos Contra las Personas de la PDI, se refirió a que el imputado habría usado una máscara para cometer los delitos.

Este elemento fue ubicado en la casa habitación de Ugalde. Tras ser sometidos a pericias, se detectó que este tenía sangra de Eduardo Cruz-Coke.

5 de noviembre – Prisión preventiva

La Fiscal Jefe de Género, Carolina Remy-Maillet y el Fiscal Jefe de Flagrancia, Francisco Lanas, quienes lideran la indagatoria, formalizaron investigación por tres delitos de homicidio calificado en contexto de violencia intrafamiliar, con alevosía y premeditación.

El Cuarto Juzgado de Garantía de Santiago decretó la medida cautelar de prisión preventiva en contra del acusado.

Desde la Fiscalía Oriente indicaron que Trinidad Cruz-Coke, hermana del padre presuntamente asesinado y esposa de Ugalde, también es una imputada en la causa.

Remy-Maillet dijo en un punto de prensa tras la audiencia que solamente se formalizó la investigación en contra de Ugalde pues «hoy hemos traído los elementos que tenemos suficientes para acreditar hasta ahora la participación» del imputado. «No hemos traído a la imputada Trinidad Cruz-Coke a esta audiencia. Solamente tiene participación en algunas diligencias en su calidad de imputada», añadió.

Agregó que no se ha encontrado el arma de homicida utilizada para atacar a Eduardo Cruz-Coke.

La persecutora sostuvo que el informe toxicológico de las víctimas menores de edad arrojó que a las jóvenes se les había suministrado un medicamento de sumisión. «No estamos en condiciones hoy de decir si esas concentraciones eran o no letales o cuáles son las requeridas para alcanzar dicho estado, pero sin lugar a dudas la utilización de ese elemento influyó directamente en la poca posibilidad de defensa por parte de los menores», dijo.

Fuente: Emol.com