Carreño aceptó el castigo y mientras caminaba rumbo a camarines, fue increpado por el arquero Hernán Caputto. Dos puñetazos y el golero cayó al suelo.
Y ahí comenzó la batalla campal. Al más puro estilo del relato de Paul Vásquez, ese que decía «combos iban y combos venían», medio equipo de Osorno se tiró contra el «Candonga», que recibió y también repartió.
Finalmente, tuvo que ingresar Carabineros a la cancha para llevarse detenido al delantero, quien terminó suspendido por seis meses.
Para más remate, la expulsión enfrió el partido. Situación que fue aprovechada por los Toros, que se llevaron el triunfo por la cuenta mínima a los 49′ minutos, con gol de Cristian Riadi.
Los protagonistas recuerdan
En una entrevista publicada por el medio The Clinic en julio de 2011, Juan Carreño explicó el por qué golpeó al portero de Osorno de forma tan alevosa.
Precisó que desde antes, en ese mismo encuentro, lo había insultado: «Caputto cruza toda la cancha y me empieza a insultar. Tú no podís molestar a un jugador expulsado, es un código básico del fútbol. En el fondo estaba buscando que le pegara. Por lo tanto le dije que si me sacaba la madre de nuevo, le cortaba la cabeza».
Por su parte, el otro aludido y actual técnico de Ñublense, en una entrevista ante La Cuarta, publicada en enero de 2017, desmintió insultar al entonces delantero de la usina: «Él dice que yo le saque la madre y no fue así. Solo le dije que era un mala leche. Aunque solo le alcancé a decir ‘malale…’ y ya había recibido dos combos», recordando el suceso a estas alturas, con humor. Revisa el video con la recordada pelea: