Desde Viña del Mar, la mañana de este martes, el Presidente Gabriel Boric, junto a la ministra de Interior, Carolina Tohá, y el ministro de Justicia, Luis Cordero, promulgó la Ley Antinarcotráfico, y remarcó en medio de su discurso que Chile tiene instituciones que «proteger», por lo que sentenció que «no pueden estar afectas a la guerrilla política».
«Nuestro Gobierno ha tenido y seguirá teniendo una agenda de trabajo muy clara y definida por las necesidades del pueblo y, por los compromisos que adquirimos con el país por los cuales estamos gobernando», dijo en primer lugar.
AHORA | Presidente @GabrielBoric junto a la ministra @Carolina_Toha y ministro @LuisCorderoVega promulgan la Ley Antinarcotráfico https://t.co/pGcmc4JKL4
— Gobierno de Chile (@GobiernodeChile) 9 de mayo de 2023
Luego, advirtió que ese «norte» de hacerse cargo de las urgencias, particularmente en materia de seguridad y del alza del costo de la vida, «no se modifica por coyunturas y tampoco la necesidad de bregar y hacer reformas que garanticen mayor justicia social y equidad, que están en el corazón del malestar de nuestra sociedad».
«Seguiremos trabajando firmemente por cohesionar a nuestra sociedad y recuperar la confianza interpersonal entre la ciudadanía y también de la ciudadanía hacia sus instituciones», agregó y puntualizó que «Chile tiene instituciones que tenemos que proteger y que no pueden estar afectas a la guerrilla política».
Por lo mismo, hizo un llamado a que «entre todos, independientemente de las legítimas diferencias políticas, las cuidemos, para cuidar a la gente, que es lo fundamental y el principal mandato que tenemos y la motivación que trabajamos día a día».
En relación a la ley, es necesario mencionar que lo que hace es actualizar herramientas para perseguir el narcotráfico entregando más herramientas para que las policías e instituciones del Estado puedan combatir con mayor eficacia ese delito.
Por ejemplo, aumenta las penas contra quienes provean de drogas a niños, niñas y adolescentes y crea un nuevo delito contra quienes las suministran a terceros sin su consentimiento. También golpea el «negocio» al ampliar el comiso de sus bienes y ganancias, incluso a casos sin condena. Asimismo, se informa que aumenta la fiscalización a la ruta del dinero.
El Mandatario también señaló que «en Chile esta ley permite su cultivo para el tratamiento de enfermedades. Es importante, esas personas no son delincuentes (…) Por supuesto, siempre cuando esto sea para uso personal, indicado por el médico y bajo una receta, pero tenemos que aprender como sociedad a diferenciar y centrar la persecución del Estado de los verdaderos delincuentes, perseguir a quienes delinquen y no a quienes cultivan cannabis para fines medicinales».
Fuente: Emol