Senado da luz verde a proyecto de ley que pretende establecer el kínder como obligatorio

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El Senado aprobó en general el proyecto de ley que establece la obligatoriedad del segundo nivel de transición, kínder, de educación parvularia.

Dicha iniciativa implementa la reforma constitucional aprobada durante el primer Gobierno del Presidente Sebastián Piñera en 2013 y que establece dicha obligatoriedad.

Con 28 votos a favor, 2 abstenciones y ninguno en contra, la Cámara Alta aprobó en general el proyecto que aumenta de 12 a 13 años la escolaridad obligatoria, sumando un año de educación parvularia a lo que ya establece la educación formal.

La subsecretaria de Educación Parvularia, María José Castro, destacó que «estamos muy contentos por la acogida que este proyecto ha tenido por parte de las senadoras y senadores, pues es una iniciativa fundamental y muy esperada, especialmente por las niñas y niños que actualmente no están accediendo al kínder y que, a partir de la aprobación de esta ley, sí verán asegurado este derecho».

Ahora el proyecto deberá volver a la Comisión de Educación del Senado para la discusión en particular. Una vez que entre en vigor esta ley, será exigible a partir del año escolar subsiguiente al de la fecha de su publicación en el Diario Oficial.

Claves del proyecto

La iniciativa consiste en adecuar las normas para hacer exigible la obligatoriedad del segundo nivel de transición, más conocido como kínder, constituyéndose en antecedente necesario para ingresar al primer año de educación básica.

Desde el Ministerio señalan que este proyecto es importante ya que «una educación parvularia de calidad trae efectos positivos en el desarrollo futuro de un niño, especialmente para quienes provienen de hogares más vulnerables».

Agregan que «acceder a experiencias de aprendizaje significativas, a través del juego, el descubrimiento, la resolución de problemas, la educación de las emociones y creatividad, entre otras, contribuye al desarrollo integral durante los primeros años de vida, disminuyendo significativamente las brechas que se producen desde la infancia».

Fuente: Emol