Los valores del crudo subían más de 5%.

El petróleo se disparó después de que Estados Unidos anunciara sanciones contra los mayores productores de Rusia, lo que amenaza el suministro mundial y podría provocar una reconfiguración de los flujos comerciales globales. El precio del barril de Brent del mar del Norte, para entrega en diciembre, subía un 5,05% a 65,75 dólares. Su equivalente estadounidense, el barril de West Texas Intermediate, para entrega en el mismo mes, ganaba un 5,18% a 61,53 dólares.

La inclusión en la lista negra de las petroleras rusas Rosneft PJSC y Lukoil PJSC llega en un contexto de crecientes preocupaciones por el exceso de oferta, justo cuando la alianza OPEP+, que Rusia codirige junto con Arabia Saudita, aumenta su producción. Altos ejecutivos de refinerías en India —un comprador clave del crudo ruso— afirmaron que las restricciones harán imposible mantener esos flujos.

«Es algo importante», señaló Ole Hansen, jefe de estrategia de materias primas de Saxo Bank A/S. «Podría obligar a un cambio en la narrativa reciente del exceso de oferta, llevando a los operadores a ajustar sus posiciones hacia una postura neutral o incluso alcista».

Mientras tanto, la Unión Europea intensificó la presión sobre el Kremlin al adoptar un nuevo paquete de sanciones que apunta a la infraestructura energética de Rusia.

La cantidad de crudo almacenado en buques petroleros en alta mar ya ha alcanzado un récord, y la Agencia Internacional de Energía prevé que la oferta mundial de petróleo superará la demanda en casi 4 millones de barriles diarios el próximo año.

Aun cuando la abundancia de suministros podría amortiguar el impacto de estas sanciones, no deben subestimarse. Reorganizar las importaciones de India —más de un tercio de las que provienen de Rusia— sería una tarea enorme. La medida también está provocando sacudidas en la industria petrolera de China, que importa hasta 20% de su crudo desde Rusia.

Con todo, Rusia tiene amplia experiencia en eludir sanciones y su impacto final aún no está claro. Las exportaciones marítimas de crudo del país alcanzaron recientemente un máximo de 29 meses pese a las restricciones impuestas por Occidente. La refinería india Nayara Energy, respaldada por Rosneft, podría seguir siendo una vía de salida para el petróleo ruso.

Pero las sanciones «marcan un cambio en el enfoque del presidente Trump hacia Rusia y abren la puerta a medidas más duras en el futuro, que podrían afectar los flujos de crudo ruso», dijo Warren Patterson, jefe de estrategia de materias primas de ING Groep NV en Singapur.

«La incertidumbre radica en cuán efectivas serán estas sanciones y qué impacto real tendrán sobre las exportaciones», agregó.

Fuente: Emol.com