Un nuevo episodio de robo en dependencias estatales se suma al creciente historial de sustracciones que han afectado a diversas reparticiones públicas en los últimos años. Esta vez, 10 computadores portátiles fueron robados de la Subsecretaría de Prevención del Delito, ubicada en el edificio Espacio M. Desde la institución liderada por Carolina Leitao, aseguraron que los equipos no contenían información sensible que pudiera comprometer el funcionamiento del organismo, al tiempo que se inició un sumario administrativo para esclarecer responsabilidades internas.
Este incidente recuerda otros casos emblemáticos, como el robo de 23 computadores y una caja fuerte desde el Ministerio de Desarrollo Social en julio de 2023, hecho que derivó en la renuncia del entonces ministro Giorgio Jackson en medio del Caso Convenios. Desde entonces, se han registrado al menos 19 eventos similares en diversas instituciones, entre las que destacan la Dirección de Vialidad, Junaeb, Mejor Niñez, y recientemente, la Subsecretaría de Educación Superior. Estos hechos, además de involucrar pérdidas materiales significativas, han generado cuestionamientos sobre la seguridad en las oficinas públicas y la protección de la información estatal.
El patrón de estos ilícitos incluye métodos de ingreso como el escalamiento, el forzamiento de puertas y el robo de equipos tecnológicos. A pesar de las garantías sobre la inexistencia de datos sensibles en los computadores sustraídos, estos casos han encendido alarmas sobre las brechas en los protocolos de seguridad y han alimentado la discusión sobre la necesidad de reforzar medidas preventivas en el aparato público. La reiteración de estos episodios subraya la urgencia de un enfoque integral que permita garantizar la integridad de las dependencias estatales y de la información bajo su resguardo.
