El asesinato de Felipe Mendoza, funcionario municipal de Osorno a cargo del Estadio Altay, continúa generando conmoción entre sus compañeros de trabajo y autoridades locales. Tras conocerse la detención de tres presuntos autores del crimen, el alcalde de Osorno, Jaime Bertin, valoró el avance de la investigación y expresó el profundo impacto que este hecho causó en la comunidad municipal.
Bertin añadió que en el municipio existe dolor y frustración tras el crimen ocurrido el pasado 12 de agosto. Funcionarios que trabajaron con Mendoza han manifestado su consternación, destacando su rol en el equipo y el vacío que deja su partida. El alcalde reiteró que la comunidad municipal “espera justicia y que los tribunales impongan el castigo que corresponde”.
Las detenciones se concretaron en las últimas horas por el delito de robo con homicidio, luego de un trabajo coordinado entre las policías y el Ministerio Público en la región del Biobío. Felipe Mendoza, de 32 años, había viajado desde Osorno hasta Concepción junto a su hijastro de 15 años —futbolista juvenil de Deportes Provincial Osorno— para concretar la compra de un vehículo, pero la supuesta transacción resultó ser un engaño que terminó con su asesinato frente al adolescente.
Según los antecedentes policiales, los tres detenidos corresponden a los autores materiales del crimen, todos chilenos y mayores de edad. En el operativo también fue arrestada una cuarta persona vinculada a infracciones a la Ley 20.000 y a la Ley de Control de Armas y Explosivos. La investigación incluyó el ingreso a siete domicilios con autorización judicial y uno de manera voluntaria, donde se incautaron tres celulares, vestimenta asociada al delito, un cartucho calibre 9 mm, una pistola Beretta sin número de serie, una motocicleta robada y diversas cantidades de droga.
Los imputados serán puestos ante el tribunal este miércoles para el control de detención, donde se detallarán los cargos y se evaluarán las medidas cautelares.









